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Estimados compañeros y compañeras, les invitamos a levantar esta campaña
Por:Sylvia García
La niebla arropa el blanco vestido del Taita Chimborazo, mientras junto a él, duermen los duendes del encanto y renacen las chukirawas.
Baltazar Ushca, con sus 65 años y un raído poncho rojo encima, madruga en la humilde casa de barro y paja, y sale a recorrer su mundo andino, seguido por tres mulas y a veces, de su hija.
El frío muerde y el viento azota; sin embargo, él, aprieta el paso en pleno páramo, levantando el polvo del camino que a costa de ir y venir, se ha formado con sus huellas. Y es que, mientras unos van a la oficina o a cualquier trabajo urbano, otros aran la tierra y siembran y cosechan…. Baltazar camina hacia su benefactor, el Taita Chimborazo, que es quien le prodiga alimento desde hace 50 años. De su padre heredó la profesión, que antes la compartía con varios grupos de campesinos.
Y dicen que las nieves de la montaña se terminan, que el calentamiento global extermina los glaciares, pero él, parte como es del Apu, desmiente cada teoría, y asegura que el hielo nace día a día desde su interior. Y a él, dioselopague, le debe su vida, la de su warmi, de sus hijos y su nieto; su educación, salud y la felicidad de respirar aire puro.
Sin otro sonido que el del silencio, y de cuando en cuando el aleteo de los gavilanes, Baltazar sube hasta los 5.220 metros de altura, cargado de su pico y pala. A una temperatura de 7 grados bajo cero, comienza a roer sobre la piel arenosa del Taita Chimborazo, hasta encontrar en sus entrañas la blancura guardada por cientos de años.
La paja de páramo, guardiana del agua, también provee su ofrenda de existencia al hielero, quien con sus diestras manos teje cordones para amarrar el traje nuevo de los bloques de hielo, de 40 kilos de peso.
Y el regreso espera; el mismo trayecto pero al revés, y alejándose de la mina de hielo, Baltazar con sus mulas llegan a los mercados de Riobamba, a vender el fruto de su titánico trabajo, a 2,50 dólares los 20 kilogramos.
Pero a Baltazar Ushca, como a una estrella, lo vemos de lejos, inalcanzable, intangible y esfumándose entre la bruma del olvido; y es que hoy es solamente un atractivo turístico, un personaje de muestreo entre las vivencias inverosímiles alrededor de la tierra, es una sombra entre las luces de las cámaras ….
Y quienes hemos vivido en Riobamba, y lo hemos saboreado en los jugos del mercado de San Francisco y de la Merced, sentimos que este hombre, esencia de volcán, merece mucho más que sonreír con sus grandes dientes amarillos y sus ojos luminosos, ante las cámaras de los extranjeros que se sorprenden al compartir su faena. Este ser humano infinito, necesita vivir con dignidad, no entre propagandas “culturales”, turísticas, ni políticas, sino más bien con la seguridad integral necesaria para rescatar el derecho de un ciudadano de la tercera edad que ha cumplido con creces su período de trabajo. Y no se trata de pedir para él un bono de la indignidad, sino la jubilación que le corresponde por su duro trabajo durante 50 años.
…Y Baltazar Ushca no se alejará de su Taita Chimborazo, lo sabemos; seguirá caminando por su piel de seda, pero ya no escarbará en su vientre….sólo subirá a cantarle en kichwa y en cristiano una y otra vez, por la generosidad de haberle permitido vivir con armonía.
JUBILACION PARA BALTAZAR USHCA, AUNQUE NO SEA LICENCIADO!
CANCIÓN PARA BALTAZAR USHCA
BALTAZAR USHCA
L. y M. Fernando Chávez
(Sobre un artículo de Sylvia García)
El frío muerde y el viento azota,
y sin embargo él aprieta el paso;
adversidades no lo derrotan
camino hacia el Taita Chimborazo.
El páramo, curador del agua,
testigo de triunfos y fracasos;
cuida la paja, la chukirawa,
entre las nieves del Chimborazo.
Y los gobiernos con sus cadenas,
y los poetas en su parnaso;
Baltazar Ushca escribe poemas,
con pico y pala en el Chimborazo.
Ponchito al hombro, zapatos viejos,
desde la aurora hasta el ocaso;
Baltazar Ushca viene de lejos,
a sacar hielo del Chimborazo.
Baltazar Ushca, como una estrella;
el aire limpio, el pan escaso;
respira, sueña, deja su huella
en la blancura del Chimborazo.
Y los gobiernos con sus cadenas,
y los poetas en su parnaso
Baltazar Ushca escribe poemas,
con pico y pala en el Chimborazo.
http://www.emudesc.net/foros/cafeteria/260765-baltasar-ushca-hielero-del-chimborazo.html
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